DICTAN DETENCIÓN DOMICILIARIA PARA UNO DE LOS IMPUTADOS EN CASO ESTAFA QUE INVOLUCRA A INMOBILIARIA FERNÁNDEZ BIENES Y RAÍCES DE TARIJA

La mañana de este 11 de agosto se llevó a cabo la audiencia de medidas cautelares de dos de los imputados en el caso de estafa agravada, estelionato y asociación delictuosa, que implica a la inmobiliaria Fernández Bienes y Raíces. El Juez determinó que Paulo Antonio M.G. cumpla detención domiciliaria con escolta policial, el pago de una fianza de 50 mil bolivianos, la presentación de dos garantes y un arraigo nacional. El segundo imputado no se presentó a la audiencia, razón por la cual, se lo declaró rebelde y se emitirá un mandamiento de aprehensión.

Exactamente 25 víctimas iniciaron el proceso, sin embargo, existen otras 10 que se suman paulatinamente. El daño económico de estas personas asciende a 1 millón de bolivianos, así lo manifestó el abogado Franz Gareca, quien recordó que habían cinco involucrados en el hecho, pero uno de ellos incluso ya murió, toda vez que las estafas datan desde el 2012.

El Ministerio Público realizó la imputación formal contra William F.O., Wilfredo J.M, Juan Bautista A.C. y Paulo Antonio M.J. «Se ha presentado una acción penal contra cinco (personas) y uno ha fallecido, entonces, el señor William F.O. y el señor Wilfredo J.M. se desconoce su domicilio y ambos fueron declarados rebeldes contumaz (de acuerdo al Autointerlocutorio 51/2021, del 9 de agosto de 2021) ante el Juzgado Cautelar por el proceso de Estafa y Estelionato agravado con víctimas múltiples (…) El señor Juan Bautista A.C. no se hizo presente y no presentó justificativo, entonces él también ha sido declarado rebelde en esta audiencia», sostuvo el Abogado.

Entonces, Paulo Antonio M.G. es el único que tiene medidas cautelares, pues los demás fueron declarados rebeldes. Al respecto, una de las víctimas, Marisol Hoyos, lamentó la situación, toda vez que ella y su familia «tenían sueños» respecto a sus nuevos terrenos, no obstante, hoy se ven envueltos en un proceso legal que pareciera no tener fin. Exhorta a las autoridades a tomar cartas en el asunto y evitar que se sigan estafando con la venta «a diestra y siniestra» de terrenos ilegales».

«Mi familia compró seis lotes, pagamos como 35 mil dólares, sin embargo no se nos entregó ninguno. Lamentamos la justicia boliviana, nos sentimos completamente solos. Ellos son los llamados a cuidarnos y velar por la ciudadanía. En su momento, a Marcelo F. se le dio un arraigo, sin embargo desapareció, se presume que está en Argentina», expresó.