YPFB ASEGURA HABER ENCONTRADO UNA NUEVA CUENCA HIDROCARBURÍFERA EN MAYAYA X1, CON UN POTENCIAL DE 7 TCF
La estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) asegura haber hecho historia, al descubrir una nueva cuenca hidrocarburífera en el subandino norte del país, donde confirmó el éxito exploratorio del pozo Mayaya Centro X1 que, de acuerdo con las pruebas de producción tendría un potencial de 7 trillones de pies cúbicos (TCF) de hidrocarburos, es decir, líquidos y gas.
Fue el Presidente del Estado, Luis Arce, quien se encargó de dar “la primicia”, la mañana de este lunes, en La Paz, durante la Sesión de Honor por los 215 años de la gesta libertaria del 16 de Julio de 1809. Sin dar nombres, hizo referencia al gobierno de Evo Morales, que gastó $us 500 millones en proyectos exploratorios en el norte paceño, pero ahora “con 50 millones de dólares de inversión en nuestro gobierno, hemos descubierto un megacampo en el norte paceño”, afirmó.
En horas de la tarde, en Santa Cruz, el presidente de YPFB, Armin Dorgathen, explicó que se trata de una nueva cuenca hidrocarburífera, así como hace 100 años se descubrió la del subandino sur, con el pozo Bermejo X2, que permitió el desarrollo de campos en los departamentos de Tarija, Chuquisaca y Santa Cruz.
“Hoy el (pozo) Mayaya Centro hace el descubrimiento del subandino norte, que es una cuenca que comprende parte del norte de La Paz, parte de Beni y parte Pando (…).No es solamente un nuevo megacampo que se descubre, si no es una frontera exploratoria nueva, estamos hablando de que La Paz se convertirá en el quinto departamento productor de hidrocarburos, por lo cual es un hito histórico”, señaló Dorgathen.
Según el ejecutivo, se realizaron las pruebas de producción en tres niveles de las formaciones geológicas Devónico Inferior y Devónico Superior, que dan una producción de alrededor de 15 millones de pies cúbicos día (MMp3d), lo que permite una perspectiva de perforación de tres pozos de delimitación.
“Solamente esta estructura de Mayaya, estamos hablando que en la zona tenemos alrededor de cinco estructuras de alrededor de 1.7 TCF cada una; estamos hablando de alrededor de un potencial de 7 TCF solamente en esta zona aledaña en cinco estructuras similares en una cuenca, que tiene un potencial muchísimo más alto”, resaltó el ejecutivo.
En ese sentido, el presidente de YPFB subrayó que se trata de una “segunda era” de los hidrocarburos en Bolivia, un “megadescubrimiento”, aunque falta definir el tamaño de la estructura, con la perforación de dos o tres pozos más.
Dorgathen detalló que la inversión realizada en el proyecto exploratorio fue de $us 60 millones, pero no se atrevió a calcular las millonarias inversiones que se realizarán para evacuar la producción de gas y líquidos hacia las plantas de procesamiento más cercanas. Analistas advierten, desde hace tiempo, que para ello YPFB no está en condiciones y tendría que contar con financiamiento externo.
“Estamos hablando de una zona no tradicional, de una cuenca nueva; vamos a tener que construir un ducto. Estamos ya viendo todas las alternativas y vamos a ver cómo también utilizamos la infraestructura con la que ya contamos en el país, para que estos hidrocarburos, tanto líquidos como gaseosos puedan exportarse de la mejor manera posible”, apuntó, a tiempo de mencionar que la producción de gas tomará unos tres años conectarla a la red de ductos del país.
No hicieron caso
Armin Dorgathen, en distintas oportunidades, manifestó que “hace varios años” (2016) el Gobierno contrató a la consultora francesa Beicip-Franlab, que elaboró un proyecto en el que recomendó la perforación de al menos siete pozos para mantener el nivel de reservas de gas en el país, pero el entonces presidente de YPFB, Luis Alberto Sánchez y el mismo Evo Morales ignoraron la advertencia.
Este lunes, el ejecutivo de YPFB volvió a citar el estudio, que también indicaba que se debía perforar el pozo Mayaya. “Sin embargo, en esa época se toma la decisión de poder perforar Lliquimuni, en lugar de Mayaya (…). “Nosotros tomamos esta recopilación de información de esta consultora y comenzamos a hacer diferentes estudios sísmicos e hicimos diferentes reprocesamiento (…) porque sabíamos que había un potencial en Mayaya”, relató.
“Hicimos todo este trabajo, lo presentamos en junio del 2021 en el Plan de Reactivación del Upstream y, a partir de ahí, el año 2022 ya comenzamos con todas las obras civiles, la perforación del pozo y ahora ya con la conclusión de las pruebas en la formación Tomachi, que pertenece al Devónico”, agregó.
EL DEBER
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