EL HOMBRE DESPUÉS DE UN AÑO CONFESÓ EL ASESINATO DE SU HIJA, RECIBIÓ LA MÁXIMA CONDENA
Un hombre de 38 años de edad fue sentenciado a 30 años de privación de libertad tras haber confesado el feminicidio de su hija de 17 años, hecho ocurrido en la comunidad de Alto Palmar del municipio de Puerto Villarroel, en Cochabamba en 2022.
La fiscal departamental, Nuria Gonzáles, informó que el caso salió a la luz luego de las sospechas de la exesposa del principal acusado y madre de la víctima, quien no sabía nada de su hija tras casi un año.
Dentro del primer informe policial se indicó que el hombre fue a trabajar a su chaco junto a su hija la mañana del 22 de agosto de 2022. La joven constantemente se distraía con su celular hecho que provocó el enojo de su padre que le reclamó y en medio de la discusión el sujeto la golpeó en la cabeza y luego la estranguló quitándole la vida.
Después de lo ocurrido, el hombre procedió a enterrar el cuerpo de su hija en su chaco y para ocultar lo que hizo, inventó una historia para contar a su esposa y madre de la víctima una vez retornó a su casa.
El sujeto le dijo a su pareja que su hija se escapó cuando él fue a comprar coca, versión que fue creída en su momento. Después de un par de meses, el sujeto volvió a mentir al decir que se comunicó con su hija y que ella le mencionó que estaba con su novio en Argentina y que no pensaba retornar.
Sin embargo, tras separarse de su pareja, la mujer indagó para dar con el paradero de su hija, por lo que alertó a la Policía del hecho.
“Cuando se han encontrado unos mensajes de una aparente relación afectuosa que tendría con la hija es que se ha procedido con la indagación y a descubrimiento del cuerpo que el mismo agresor ha llevado”, dijo la autoridad.
La Policía logró encontrar el lugar donde la adolescente fue golpeado, posteriormente estrangulada para finalmente ser enterrada en un chaco.
La fiscal agregó que la zona donde fueron hallados los restos de la víctima era una zona totalmente alejada donde únicamente se podía llegar con ayuda de una balsa.
“En esa situación de vulnerabilidad es que la adolescente ha sido victimada con golpes y por una asfixia mecánica de acuerdo al protocolo de autopsia que se ha conocido”, aseveró.
El padre confesó el violento crimen y se sometió a un proceso abreviado llegando a recibir la condena máxima sin derecho a indulto, la cual deberá cumplir en el penal de máxima seguridad de El Abra.
Con la confirmación de la muerte de esta adolescente, Cochabamba registra su décimo feminicidio en lo que va del año.
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