ESTE 17 DE JULIO SE CONMEMORAN 45 AÑOS DEL GOLPE MILITAR QUE INSTAURÓ UNA DE LAS DICTADURAS MÁS CRUENTAS DE LA HISTORIA BOLIVIANA DE GARCÍA MEZA

El 17 de julio de 1980 marcó un hito oscuro en la historia boliviana con el último golpe de Estado, liderado por el general Luis García Meza y el coronel Luis Arce Gómez. Este golpe instauró un régimen de facto que duró poco más de un año, caracterizado por la represión, torturas, asesinatos y desapariciones forzadas.

Durante ese período, el régimen también estableció vínculos con el narcotráfico, al punto que Arce Gómez, quien fue ministro del Interior, fue conocido como el “ministro de la cocaína”. Su reputación se vinculó con amenazas a opositores, incluyendo su recordada frase para que caminaran con “el testamento bajo el brazo”.

El golpe derrocó a Lidia Gueiler Tejada, la primera presidenta de Bolivia, quien había asumido el cargo el 16 de noviembre de 1979 en medio de una crisis política. Gueiler, prima de García Meza, fue obligada a renunciar públicamente en un acto humillante tras el alzamiento militar. Ella falleció el 9 de mayo de 2011.

Tras el fin de la dictadura, García Meza y Arce Gómez fueron sometidos a un juicio de responsabilidades que duró más de nueve años y culminó en abril de 1993 con una condena de 30 años sin derecho a indulto. García Meza fue capturado en Brasil mientras intentaba evadir la sentencia y Arce Gómez fue deportado desde Estados Unidos tras cumplir una condena por narcotráfico. Ambos murieron cumpliendo la pena en Bolivia.

Datapolis