UNA NIÑA SALVÓ LA TRICOLOR ANTES QUE EL FUEGO DEVORE SU ESCUELA EN SAN MATÍAS
Katerine es una niña de nueve años tuvo la valentía de salvar la bandera nacional que estaba en el mástil de su escuela antes que un voraz incendio forestal pulverice el lugar. El gesto conmovió a un grupo de policías que fue enviado a San Matías para ayudar a sofocar el fuego que está destruyendo la riqueza silvestre del país.
Este hecho tuvo lugar en la unidad educativa Cañón de Fátima que está a unos 40 minutos de San Matías, la capital de la provincia Ángel Sandoval, fronteriza con Brasil. Es una de las áreas más devastadas por los incendios forestales, la mayoría de ellos provocados por intereses económicos.
A mediodía del jueves 22 de agosto, el fuego estaba devastando los alrededores de la escuelita, mientras los habitantes del casorio que la rodeaba huían desesperados para salvar cosas y enseres.
Katerine, quien vive en la comunidad, corrió; subió las gradas del pedestal y llegó hasta los tres mástiles de su escuela. En uno de ellos flameaba la tricolor, mientras las llamas estaban por superar los tres metros, según testigos contactados por EL DEBER.
Este acto conmovió a una de las hermanas de Katerine, así como a algunos pobladores que, al ver cómo ella se dio modos y logró bajar la bandera, intentaron llegar sin éxito a la escuelita por la densa humareda provocada por el fuego.
Cuando estuvo con la bandera en sus manos, Katerine la apretó fuerte y comenzó a correr mientras el denso humo y el fuego se hacía más peligroso para su vida.
El contingente policial, que estuvo cerca al mando del mayor Ramiro Serrano García, llegó poco después al centro educativo para evitar que el desastre sea mayor.
“Llegamos a tiempo, vimos cuando la niña Katerine corría con la bandera envuelta sobre su espalda junto a su hermanita. Corría por un camino de tierra en medio del humo y bajo la amenaza del intenso fuego”, dijo Serrano.
Los policías tomaron la ayudaron cuando las llamas ya estaban al lado del camino de tierra consumiendo pastizales secos; acabando con toda la vida posible.
La presencia de policías tranquilizó a la niña y su hermanita, así como pobladores de esa comunidad. La tricolor quedó bajo resguardo. “Fue uno de los momentos que más nos conmovió, ver el amor de Katerine al símbolo nacional para evitar que sea consumido por el fuego”, dijo otro efectivo policial que estaba allí.
Después de dar todo su esfuerzo, Katerine mostró su entusiasmo y se sacó fotos con los policías.
Los policías pusieron en resguardo la bandera nacional. Tomaron contacto con autoridades educativas y municipales para recibir mayor información de la unidad educativa Cañón de Fátima.
La escuelita de nivel primario funciona con un plantel educativo reducido por efecto de los incendios forestales que afectan esa comunidad matieña.
Según los policías, Katerine vive con sus padres que se dedican a la agricultura. La acción que desarrolló impulsada por su propia iniciativa fue destacada por los habitantes de esa comunidad.
Comparada con Genoveva Ríos
La acción de Katerine, por salvar del fuego la tricolor nacional fue comparada con el acto heroico de Genoveva Ríos, la niña de 14 años que, según registros de la historia de Bolivia, resguardó la bandera boliviana del edificio de la Intendencia de la Policía de Antofagasta, durante la ocupación chilena que el 14 de agosto de 1879 marcó el inicio de la Guerra del Pacífico.
La dura misión de los policías
Los policías comisionados desde hace más de 15 días a la zona fronteriza ya intervinieron en la mitigación de numerosos incendios en las cercanías de San Matías como en la comunidad Las Petas y otros. Están provistos de agua hasta en botellas, en mochilas rotas, utilizando, palas, picotas y otros, pero sin condiciones reales para sofocar los incendios forestales. Están utilizando técnicas y maniobras bomberiles con equipo SAPA y mochilas de agua, según explicaron.
Los policías contaron que evitaron que el fuego llegue a haciendas, viviendas a la misma unidad educativa Cañón de Fátima. Allí se logró controlar y se enfrió en su totalidad el voraz incendio.
Las acciones de los policías movilizados en la zona seguirán en esa provincia, de acuerdo con el plan para controlar los numerosos incendios forestales que afectan esa región del departamento.
El mayor Ramiro Serrano explicó que, durante la misión de casi 15 días, participaron día y noche en diferentes zonas de los alrededores de San Matías desarrollando un trabajo con material, equipos matafuego. Vienen siendo testigos de desastres como la muerte de animalitos y toda clase de rica fauna de esa zona del país.
Las zonas afectadas por los permanentes incendios, según autoridades nacionales y departamentales son la provincia Ángel Sandoval, San Ignacio de Velasco, San José de Chiquitos, Puerto Suárez, Roboré, Ascensión de Guarayos, además de la zona norte como Yapacaní junto a otras comunidades campesinas.
La tarea de sofocar los incendios está a cargo de policías, bomberos voluntarios, pobladores y diversas unidades del Ejército.
EL DEBER
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