TARIJA PODRÍA CONCENTRAR EL LIDERAZGO DE LOS PRINCIPALES ÓRGANOS DEL ESTADO SI GUSTAVO ÁVILA ASUME LA PRESIDENCIA DEL TSE
Tarija atraviesa un momento político sin precedentes, ya que varias de sus figuras ocupan actualmente cargos de alta jerarquía en el país y podría sumarse un nuevo liderazgo si Gustavo Antonio Ávila Mercado quedaría como presidente del Tribunal Supremo Electoral (TSE).
El departamento ya cuenta con autoridades de primer nivel en distintos órganos del Estado. En el Poder Ejecutivo, el presidente del país es el tarijeño Rodrigo Paz Pereira; en el Legislativo, la Cámara de Senadores es presidida por Diego Ávila Navajas, senador por Tarija, quien fue elegido para la legislatura 2025-2026 con un amplio respaldo, obteniendo 32 de los 36 votos posibles. En el Órgano Judicial, la tarijeña Rosmery Ruiz también ocupa un cargo relevante , magistrada titular por Tarija, fue elegida decana del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ).
A este escenario podría sumarse el Órgano Electoral, donde también destaca un tarijeño: Gustavo Ávila Mercado, vocal del TSE desde abril de 2024, designado por decreto presidencial de Luis Arce. Según el análisis político del abogado Israel Quino , Ávila podría convertirse en presidente del Tribunal Supremo Electoral, lo que colocaría a Tarija al mando de los órganos de mayor poder e incidencia institucional del país.
La posibilidad de que Ávila asuma la presidencia surge porque en menos de un mes vocales del TSE dejarán el cargo, tras haber cumplido su mandato de seis años, sin opción de reelección. Todos los vocales completaron su gestión, excepto Ávila, quien lleva apenas año y medio en funciones. Ante esta situación, y debido a que el Órgano Electoral no puede quedar sin vocales en ejercicio, Ávila quedaría como el único miembro activo del tribunal, lo cual abriría la puerta a que sea designado presidente.
Según el analista político Israel Quino, esta transición podría concretarse alrededor del 19 de diciembre, fecha en la que Ávila permanecería como el único vocal habilitado. El especialista señaló además que podría emitirse un decreto presidencial para ratificarlo como vocal con un periodo constitucional de seis años, asegurando así la continuidad institucional del TSE.
Ávila cuenta con 20 años de trayectoria en el órgano electoral, donde, según Quino, “ha demostrado un gran trabajo”. El analista destacó su desempeño “sólido e importante” en los últimos procesos electorales, incluyendo elecciones judiciales, nacionales y el balotaje. Subrayó también que Ávila ha sido responsable del sistema SIREPRE, “que no ha tenido ninguna falla”, lo cual considera altamente destacable en función de la responsabilidad técnica que implica.
Si finalmente Gustavo Ávila asume la presidencia del TSE, Tarija quedaría a la cabeza del Ejecutivo, el Legislativo, el Órgano Judicial y el Órgano Electoral, un hecho inédito que colocaría al departamento en una posición de liderazgo político sin precedentes en la historia reciente del país.
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