PROVINCIA DE AYOPAYA, SE REPORTÓ UNA DISMINUCIÓN DEL 41%, LO QUE REFLEJA UNA SITUACIÓN COMPLEJA Y VARIABLE EN EL TERRITORIO DE CHAPARE.

El ministro Del Castillo, que está con el cargo de canciller interino, aseguró que este reporte lo conocieron en 2023 y que por eso se concentraron en la erradicación. La autoridad adelantó que hoy el Gobierno presentará su propio informe de erradicación, pero, de la gestión 2024.
“Para la gestión 2023, de la cual es objeto está esta intervención, hemos sobrepasado con más de 302 hectáreas, hacemos un spoiler (revelación de algo), como se dice cotidianamente, la gestión 2024 tampoco va a ser la excepción, hemos sobrepasado también las 10.000 hectáreas de erradicación y racionalización de la hoja de coca”, adelantó el ministro de Gobierno.
Este crecimiento de los cultivos de coca pone en evidencia la continua lucha entre la expansión de la producción y los esfuerzos por erradicar los cultivos ilegales. Al respecto, el viceministro de Defensa Social y Sustancias Controladas, Jaime Mamani, expresó su preocupación por el avance de los cultivos en zonas autorizadas, especialmente en el trópico de Cochabamba, controlado por sectores vinculados al Movimiento Al Socialismo (MAS). A pesar de las campañas de erradicación, que han logrado eliminar más de 33.000 hectáreas entre 2021 y 2023, el cultivo de coca sigue superando los límites legales establecidos por la ley.
“Exhortamos a los productores de coca a permitir la continuación de los trabajos de racionalización de cultivos, en beneficio de la imagen del país y en cumplimiento de los compromisos internacionales”, señaló Mamani, quien también subrayó las dificultades en la erradicación de cultivos en parques nacionales como el Territorio Indígena Parque Nacional Isiboro Sécure (Tipnis), donde grupos de cocaleros han obstaculizado las tareas de erradicación, según reveló la autoridad.
El caso que más llama la atención es el de la provincia Ichilo, en Santa Cruz. “Se identificó que la provincia Ichilo, en el departamento de Santa Cruz, tuvo el mayor incremento de superficie de coca cultivada, con un aumento del 121%. De esta manera, los cultivos de coca identificados pasaron de 181 hectáreas en 2022 a 416 hectáreas en 2023”, detalló Mendoza.
El informe de la Unodc también resalta que, en los últimos 20 años, los cultivos de coca han aumentado en un 27%, lo que indica una tendencia preocupante de expansión. A pesar de la capacidad de erradicación, las cifras muestran que la producción de coca sigue estando por encima del límite legal, con un saldo negativo para los esfuerzos del gobierno de cumplir con las metas internacionales de reducción de cultivos ilegales.
Desde 2017, productores cocaleros de Yungas y del trópico de Cochabamba pueden producir hasta 22.000 hectáreas en total, según la norma actual. El límite casi duplica a las 12.000 hectáreas de la famosa Ley 1008 que legisló la lucha antidroga.
Pese a ese margen, los cocales siempre han estado por encima de lo permitido por la nueva ley, un aspecto que ha sido observado en varias ocasiones por la Unión Europea (UE), el principal organismo multilateral que financia la lucha contra el narcotráfico y programas para reducir los cultivos de coca en Bolivia.
Este incremento de los cultivos de coca no solo pone en jaque las políticas nacionales de lucha contra el narcotráfico, sino que también afecta la percepción internacional del país. La UE ha expresado en varias ocasiones su preocupación por el incumplimiento de los límites establecidos por la Ley 906, lo que podría repercutir en la cooperación internacional para el financiamiento de programas de erradicación y reducción de cultivos.
La Fuerza de Tarea Conjunta (FTC), una unidad compuesta por militares y policías, erradicó 33.788 hectáreas entre 2021 y 2023, pero por efecto de la demanda legal, pero también para la ilegal o sea para el narcotráfico, la reducción de cocales nunca se pudo ajustar a lo que dice la norma.
El informe de la Unodc confirma una vez más que Bolivia enfrenta serios desafíos en su lucha contra la expansión de los cultivos de coca, con cifras que superan ampliamente los límites establecidos por la ley. La situación continúa siendo un tema de debate y preocupación tanto a nivel nacional como internacional.
Del Castillo dijo que en 2024 los esfuerzos se concentraron en los parques y reservas nacionales, porque era la observación que tenían de la Unodc.
El Deber