POR PRIMERA VEZ, LA MASONERÍA ARGENTINA ABRE SUS ARCHIVOS Y REVELA VÍNCULOS DE PERÓN Y ALFONSÍN COMO MASONES

La masonería argentina abrió sus puertas y dio a conocer documentos que durante décadas permanecieron ocultos en los archivos de la Gran Logia de la Argentina de Libres y Aceptados Masones, ubicada en la calle Perón 1242 de Buenos Aires. Entre los hallazgos destacan registros que vinculan a los expresidentes Juan Domingo Perón y Raúl Alfonsín con la institución.

Según la nota publicada por Infobae, los documentos incluyen fichas personales, cartas y correspondencia diplomática que demuestran que ambos líderes tuvieron algún tipo de relación formal con la masonería. Una carta fechada en 1958 describe a Perón como “Soberano Gran Comendador y Gran Maestro para la Masonería universal del rito escocés antiguo y aceptado” y solicita su apoyo económico para una campaña en Italia. Se indica que Perón alcanzó el grado 33, el máximo dentro del rito escocés.

Por su parte, Raúl Alfonsín aparece en una ficha de 1974, cuando aún era dirigente opositor. El documento incluye su fotografía, firma y un formulario de ingreso en el que se refleja su creencia en un ser supremo y su compromiso con valores humanistas. La logia donde inició su proceso de admisión estaba en Paraná, Entre Ríos, y participó en reuniones masónicas demostrando respeto por la libertad de conciencia.

El Gran Maestre de la masonería argentina, Pablo Lázaro, explicó que la apertura de los archivos responde a una voluntad de transparencia: “Queremos dejar atrás el secretismo. No tenemos nada que ocultar. La masonería fue parte de la historia argentina, y estos documentos lo demuestran”, afirmó. Lázaro también mencionó que algunos documentos hacen referencia a la Logia Unión Nacional, que habría tenido un rol simbólico en el histórico abrazo entre Perón y Balbín en 1973.

El gesto de abrir los archivos marca un antes y un después para una institución que tradicionalmente se mantuvo discreta. Los documentos originales estarán en exhibición durante La Noche de los Museos y, posteriormente, se digitalizarán para consulta pública. La Gran Logia Argentina cuenta actualmente con unos 15.000 miembros activos, entre ellos presidentes, militares, científicos y artistas, desde Sarmiento y Mitre hasta Justo y Pellegrini.

Los hallazgos revelan facetas desconocidas de los líderes: mientras que Perón había criticado públicamente a la masonería durante su vida, los documentos muestran su acercamiento a la institución durante su exilio europeo, posiblemente en la Gran Logia Alpina Suiza. En el caso de Alfonsín, su relación con la masonería refleja coherencia con su vida política, basada en el diálogo, el espíritu republicano y la defensa del laicismo.

La apertura de estos archivos ofrece una mirada inédita sobre la historia argentina, revelando cómo la política, la religión y el pensamiento libre se entrelazaron en momentos clave del país, cruzando figuras como Perón y Alfonsín bajo un mismo símbolo: el compás y la escuadra.