GANÓ MEDALLA EN PARÍS 2024 Y CONMUEVE AL MUNDO: “YA NO TIENES QUE TRABAJAR, MAMITA, TE PUEDO COMPRAR LA CASA”

Lucía Yépez Guzmán, una joven luchadora de Ecuador, ha logrado lo que muchos solo sueñan: subirse al podio olímpico. En los Juegos Olímpicos de París 2024, Yépez consiguió la medalla de plata en la categoría de 53 kilogramos de lucha libre, un triunfo que ha conmovido al mundo entero, pues al recibir su medalla, la joven no pudo contener las lágrimas mientras recordaba todo lo que había pasado y, sobre todo, al cumplir la promesa que le hizo a su madre: comprarle una casa para que no tuviera que trabajar más.

Un triunfo con un mensaje conmovedor: “Ya no tienes que trabajar, mamita”

El momento más emotivo de la jornada olímpica no fue la entrega de la medalla en sí, sino lo que sucedió después. Lucía Yépez Guzmán, visiblemente emocionada, realizó una llamada telefónica a su madre desde la sede olímpica en París. “Mamá, ya soy medallista olímpica, no tienes que trabajar mamita de mi vida, te puedo comprar la casa que te prometí”, fueron las palabras que resonaron en el ambiente, dejando a todos los presentes profundamente conmovidos.

Esta declaración no solo simboliza el éxito deportivo de Yépez, sino también su profundo amor y agradecimiento hacia su madre, quien la apoyó incondicionalmente en cada paso de su carrera. La promesa de comprarle una casa a su madre fue el motor que impulsó a Lucía a seguir adelante, incluso en los momentos más difíciles. Ahora, con la medalla en mano, Yépez ha demostrado que los sueños se pueden hacer realidad con esfuerzo, dedicación y amor.

La lucha de Lucía Yépez: de vender lápices a medallista olímpica

Lucía Yépez Guzmán no tuvo un camino fácil hacia el éxito. Nacida en una familia humilde en Mocache, provincia de Los Ríos, Ecuador, la vida le presentó múltiples obstáculos desde una edad temprana. Para poder entrenar, Yépez tenía que vender lápices y otros artículos en las calles de su ciudad, una actividad que realizaba con la esperanza de reunir suficiente dinero para pagar sus desplazamientos a los centros de entrenamiento. A pesar de las adversidades, Lucía nunca dejó de luchar, literalmente y figuradamente.

Su tenacidad no pasó desapercibida. A lo largo de los años, Yépez fue ganando reconocimiento en el ámbito deportivo, destacándose en competiciones nacionales e internacionales. Sin embargo, su preparación para los Juegos Olímpicos de París 2024 no estuvo exenta de dificultades. Lucía tuvo que recurrir a la ayuda de la empresa privada, solicitando apoyo a través de los medios de comunicación para poder completar su ciclo de preparación. Este esfuerzo finalmente dio sus frutos cuando logró clasificarse para representar a Ecuador en la cita olímpica.

En París 2024, la luchadora ecuatoriana enfrentó uno de los mayores retos de su carrera al competir en la categoría de 53 kilogramos de lucha libre. En la final, se encontró frente a Akari Fujinami, la invicta japonesa y número uno del mundo. Aunque el combate fue duro y Yépez perdió con un marcador de 10-0, su desempeño fue admirable. La medalla de plata que ganó no solo representa su esfuerzo personal, sino también el orgullo de un país entero.

0 0

También te podría gustar...

Esto se cerrará en 0 segundos