EN BOLIVIA DISMINUYEN LOS EMBARAZOS EN ADOLESCENTES DE 82.416 EN 2015 A 28.063 EN 2024

Bolivia logró reducir en dos tercios la cantidad de embarazos en adolescentes en los últimos diez años, informó Yecid Umacayo, director general de Redes de Servicios de Salud del Ministerio de Salud y Deportes, durante la audiencia pública del 193º período ordinario de sesiones de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), presidida por José Luis Caballero.

Basado en cifras del Sistema Único de Información en Salud (SNIS), Umacayo detalló que en 2015 se registraron 82.416 casos de embarazos adolescentes, mientras que en 2024 la cifra descendió a 28.063, lo que representa una reducción del 66%. El índice de embarazo por cada 1.000 nacidos vivos bajó de 18,07 en 2018 a 12,34 en 2024, y la tasa de embarazo por cada 1.000 adolescentes descendió de 50,97 a 24,67 en el mismo período.

En cuanto a los embarazos en niñas menores de 15 años, la proporción se redujo del 5,18% en 2018 al 5,03% en 2024, a pesar de un pico registrado en 2023 del 6,57%. En números absolutos, los casos bajaron de 2.949 a 1.411.

Umacayo atribuyó estos avances al esfuerzo conjunto del Estado y los servicios de salud para llegar a los adolescentes con información, atención oportuna y acceso efectivo. Destacó también la implementación del Sistema Único de Salud (SUS) en 2019, que garantiza acceso gratuito a servicios de salud, incluyendo atención sexual y reproductiva, así como el aumento de consultas externas para adolescentes de 10 a 19 años, que pasaron de 70.004 en 2021 a 106.000 en 2024, un incremento del 51,4%.

El Ministerio de Salud fortaleció su presencia en los departamentos, designando responsables específicos para el abordaje de casos de violencia y coordinando estrategias preventivas junto con la normativa sobre interrupción legal del embarazo (ILE). Sin embargo, Umacayo reconoció que la normativa presenta vacíos que dificultan su aplicación uniforme y que se trabaja en su actualización y en mejorar las herramientas de registro.

Pese a los avances, el embarazo adolescente sigue siendo un problema estructural vinculado a la falta de educación sexual integral, violencia sexual y pobreza. La delegación boliviana ante la CIDH subrayó la necesidad de reforzar el enfoque preventivo, ampliar campañas educativas y garantizar atención integral en salud sexual y reproductiva para todas las niñas, niños y adolescentes.

El presidente de la CIDH, José Luis Caballero, valoró la presentación boliviana y enfatizó la importancia de garantizar estos derechos como parte del cumplimiento de compromisos internacionales en materia de derechos humanos.