¡CONMOVEDOR! ATLETA PARALÍMPICO LLEVÓ LA ANTORCHA OLÍMPICA USANDO UN ARMAZÓN ROBÓTICO

En los Juegos Olímpicos de París 2024, un momento conmovedor destacó la jornada cuando el atleta paralímpico francés Kevin Piette, quien ha estado parapléjico desde un accidente a los 11 años, hizo historia al llevar la llama olímpica. Con 36 años, Piette participó en el relevo de la antorcha en Poissy, al noroeste de París, usando un exoesqueleto robótico. La imagen de Piette avanzando con la llama, sonriendo y saludando a la multitud, conmovió a todos los presentes y fue ampliamente compartida en redes sociales.

El innovador exoesqueleto robótico que utilizó Piette es un dispositivo avanzado desarrollado por la compañía francesa Wandercraft. Esta tecnología, presentada en diciembre en Nueva York, permite a los usuarios sentarse, pararse, caminar, subir escaleras y navegar terrenos difíciles. Equipado con sensores y controles manuales, el exoesqueleto se adapta a los movimientos y necesidades del usuario, representando un importante avance en la movilidad asistencial.https://www.dailymotion.com/embed/video/x92wdxi?autoplay=1#amp=1

Piette, quien anteriormente se reincorporó al tenis adaptado y se convirtió en tester de exoesqueletos, ha demostrado el poder de la tecnología para transformar vidas. Su participación en el relevo de la antorcha no solo celebró su valentía personal, sino también el potencial de la tecnología asistencial para mejorar la calidad de vida de las personas con discapacidades. El exoesqueleto de Wandercraft es el primero en completar un tramo del relevo olímpico, subrayando un significativo avance en este campo.

La innovación de los exoesqueletos no se limita al deporte; también está cambiando la vida cotidiana y laboral. Dispositivos como el exoesqueleto de la Universidad de Stanford están diseñados para reducir el esfuerzo físico en tareas cotidianas y en ambientes industriales. Aunque aún no están disponibles para uso personal generalizado, los avances están en marcha para hacer estos dispositivos más accesibles y eficientes.

El impacto de esta tecnología se extiende a otros casos inspiradores, como el de Oscar Constanza, un joven con una enfermedad neuromuscular que usa un exoesqueleto diseñado por su padre, Jean-Louis Constanza, cofundador de Wandercraft. Historias como la de Piette y la de Constanza demuestran cómo la tecnología puede derribar barreras y ofrecer nuevas oportunidades a quienes enfrentan desafíos físicos, redefiniendo la movilidad y la independencia para millones de personas.

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