CODEFAUNA ALERTA SOBRE REDUCCIÓN DEL TAMAÑO DEL SÁBALO Y SU ESCASEZ TEMPORAL POR EL FRÍO

Evelio Téllez, director de CODEFAUNA, brindó declaraciones sobre la situación actual del sábalo en el río Pilcomayo, destacando que las bajas temperaturas y la sobreexplotación están afectando tanto la presencia como el tamaño del pescado en mercados tarijeños.

Durante su intervención, Téllez aclaró que, hay rumores infundados, el sábalo no presenta triquina, dado que es un pez de sangre fría. Explicó que pueden existir algunos parásitos, como en cualquier ambiente acuático, pero no representan riesgos para la salud humana si el pescado se cocina adecuadamente. “A los 60 grados los parásitos mueren, y cuando uno cocina pescado se alcanzan temperaturas mucho mayores, garantizando su consumo”, afirmó.

Sobre la escasez actual del sábalo en los mercados, el director señaló que se debe a la combinación de frentes fríos y la migración natural de los cardúmenes. “En estos días hay menos oferta, pero la próxima semana se espera el ingreso de una mayor cantidad”, indicó, anticipando que la actividad comercial volverá a la normalidad pronto.

Sin embargo, Téllez expresó su preocupación por el deterioro progresivo en la calidad del sábalo. “Cada año vemos que los ejemplares son más pequeños, tanto en peso como en tamaño. Antes pesaban hasta 3 kilos y medían más de 40 centímetros; hoy eso ya no se ve en el Pilcomayo”, lamentó. Atribuyó este fenómeno a una degeneración genética causada por la sobrepesca y la presión ambiental.

Además, advirtió que la extracción excesiva de agua del Pilcomayo en Argentina y Paraguay, destinada a actividades agrícolas y ganaderas, también está afectando el ecosistema del río. Aunque la competencia de CODEFAUNA se limita al territorio nacional, Téllez informó que se están evaluando medidas para monitorear el curso del río hasta el Bañado La Estrella (Argentina), con el fin de entender mejor lo que sucede en tramos transfronterizos.

El director concluyó haciendo un llamado a la conciencia colectiva sobre la preservación del sábalo y a esperar con calma el retorno del cardumen cuando mejoren las condiciones climáticas.