FALLECE EL ÚLTIMO HÉROE DE «LOS TRES PASOS AL FRENTE» DE LA GUERRA DEL CHACO

Numa René Ávila del Carpio,  el último héroe de la generación de Los tres pasos al frente  que participó en la Guerra del Chaco, murió  el  domingo en  la ciudad de Santa Cruz. En Bolivia sólo quedan seis beneméritos de los aproximadamente 200 mil soldados que fueron movilizados entre 1932 y 1935 para combatir contra Paraguay.

Ávila del Carpio, que nació el 17 de noviembre de 1915, falleció a sus 104 años cuando faltaban dos días para cumplir 105 años. “Mi papá estuvo internado en terapia intensiva y ya no pudo aguantar y nos dejó”, dijo  Roxana Ávila, su hija, desde la capital oriental. Los restos del héroe de la guerra eran velados en instalaciones del Museo Histórico Militar con la guardia de honor.

Don Numa, el coronel Numa o el general Numa, como era conocido en la zona de El Trompillo en Santa Cruz,  perteneció a la famosa generación de Tres Pasos al Frente, los muchachos de 16 y 17 años a los que los superiores les preguntaron tres veces si estaban dispuestos a ir al frente de batalla para defender a la Patria, pese a su corta edad. “Era el encargado del grupo de los Tres Pasos al Frente y cuando hablaba de la guerra, mi padre se emocionaba mucho”, añadió  Roxana desde Santa Cruz.

El héroe de la guerra era uno de los siete sobrevivientes del Chaco que   ganó  a la  Covid-19. En octubre, cuando Página Siete publicó una nota sobre estos excombatientes, su hija relató que su padre estaba en cama, por un problema pulmonar que lo tenía muy delicado.

En plena pandemia, Roxana Ávila, su hija, señaló que su padre no se dio cuenta de la emergencia sanitaria que el territorio nacional vivió desde marzo. “Lo protegimos mucho a mi papá, no dejamos  ingresar a casi nadie a la casa para evitar que pueda contagiarse del virus y si algún familiar entraba a su habitación debía ser desinfectado, sólo así podían verlo”, narró hace un mes.

El 24 de julio, María Pizarro, esposa de Numa,  falleció a sus 81 años. “Ella no murió por Covid-19 y yo no le dije nada a mi papá de la muerte de mi mamá, pero ante tanta insistencia le dije que se fue al cielo”, narró  Roxana. La pareja estuvo unida por más de seis décadas.

Después y ante la preocupación de la familia por la amenaza del coronavirus y el llanto de sus hijos ante las decenas de fallecimientos en Santa Cruz, el excombatiente  alcanzó a decir con voz pausada a su hija Roxana: “No vas a llorar, hija”. 

El 14 de octubre,  el   entonces ministro de Defensa  Luis Fernando López  entregó una condecoración a Ávila. Cubierto con un barbijo, López   dio a Numa la condecoración Mariscal Andrés de Santa Cruz en el Grado de Gran Oficial de la Orden. En años anteriores,  otras autoridades departamentales también le entregaron sendas condecoraciones.

“Hubo un momento en el que murieron 250 soldaditos que se habían incorporado recién en las acciones. Así fue la guerra”, solía contar Numa a sus hijos de su paso por la Guerra del Chaco.

Con la partida de Ávila del Carpio, en Bolivia sólo quedan  seis excombatientes del Chaco: Samuel Chuquimia Murillo (104 años), Emeterio Ernesto Talavera Choque (102 años), Miguel Siñaniz Vigabriel (102 años) y Marcelino Guzmán Alarcón (106 años) en La Paz; Pedro Pocubé Muller (104 años) en Santa Cruz; y José Pradel Loayza (106 años) en Sucre.

Entre marzo y principios de junio de 2020 fallecieron tres beneméritos, los cochabambinos Héctor Hugo Valenzuela y Luis Terán Salazar, además del cruceño Avelino Alcócer Vaca.